Capital natural

El Capital Natural abarca todos los elementos de la Tierra (suelo, aire, agua flora y fauna) y los servicios de los ecosistemas derivados que hacen posible la vida humana. Los bienes y servicios del Capital Natural tienen un valor de billones de dólares cada año y proporcionan alimentos, materiales, agua, salud, energía, regulación de gases, seguridad climática y otros servicios esenciales para todos.

Dar un valor a dichos servicios y los elementos constitutivos del Capital Natural que los producen facilita su identificación, medición y, sobre todo, su puesta en valor de la forma más adecuada para la toma de decisiones, utilizando la misma métrica con la que las organizaciones toman decisiones en relación con el capital financiero, el capital productivo o el capital inmobiliario: euros.

La monetización del Capital Natural permite así presentar en euros los impactos que los estudios de evaluación ambiental de proyectos valoran tradicionalmente como adjetivos (compatible, moderado, severo, crítico…), con lo que se reduce la subjetividad de las valoraciones y se facilita la verificación de la sostenibilidad de un proyecto.

Es un objetivo impuesto por La estrategia para la biodiversidad en la EU para 2030 “Volver a poner la naturaleza en nuestras vidas”

“Las consideraciones de biodiversidad deben integrarse mejor en la toma de decisiones públicas y empresariales en todos los niveles”.

“Esto incluirá la medición de la huella ambiental de productos y organizaciones en el medio ambiente, incluso a través de enfoques de ciclo de vida y contabilidad de capital natural”.

Objetivos

Es útil y eficaz para todo tipo de organizaciones estimar el valor económico de sus impactos, negativos o positivos, sobre el capital natural, generalmente con alguno o algunos de los siguientes OBJETIVOS:

  1. Estimación del valor de impactos negativos sobre el capital natural.
  2. Estimación del valor de impactos positivos sobre el capital natural.
  3. Compensación de impactos negativos con impactos positivos:
    • Sobre el capital natural o sobre los servicios ecosistémicos.
    • En el momento actual o en momentos posteriores.

Para qué

Las principales utilidades de la monetización de impactos (negativos o positivos) sobre el capital natural a partir de la variación (reducción o aumento) del valor de los servicios ecosistémicos, son:

Ser más responsable, y proyectarlo ante el accionarado, clientes, inversores, socios de negocio, financiaciones, administraciones públicas (licitaciones), ciudadanía, etc.

  • Medir y cuantificar los impactos generados sobre el Capital Natural para conocer su valor directo, y por tanto los efectos positivos y negativos que la empresa, organización o proyecto genera a través de sus actividades productivas, comerciales, de su cadena de suministro, así como su valor indirecto, que es en el que basan sus opiniones los grupos de interés externos, que influyen en las decisiones que toman las administraciones y la ciudadanía.
  • Reducir los recelos y desconocimiento de algunos stakeholders y grupos de interés que magnifican los adjetivos habitualmente utilizados para valorar los impactos medioambientales, a cambio de ofrecer su valoración económica.
  • Contribuir con un “extra” a la documentación a presentar para adjudicaciones de contratos de servicios y obras, explicando y cuantificando el Capital Natural, de la actividad a licitar versus otras alternativas.

Por qué

  • La valoración económica de las actividades de impacto positivo permite una mejor toma de decisiones.
  • La Valoración Económica del Capital Natural es una actividad inherente al cumplimiento de la Estrategia para la Biodiversidad la UE para 2030 “Volver a poner la naturaleza en nuestras vidas”, y los principios adoptados por el WBCSD, su información debe considerarse como complementaria (siguiente paso) al resto de la información sobre sostenibilidad gestionada por la organización, además, la información obtenida es totalmente compatible y en lo anterior con los Estándares de uso común para ambos: el reporte de información no financiera por parte de las compañías (TCFD, GRI y SASB) y la calificación de las inversiones para fondos / instituciones financieras como sus instalaciones responsable y / o sostenible con el medio ambiente natural.
  • En resumen, es una herramienta para aquellas instituciones que pretenden ser más responsables y proyectar dicha imagen ante la opinión pública, la administración, los inversores y los financiadores.

Qué hacemos

1. Estimar el valor monetario del capital natural en un área geográfica.

2. Estimar el impacto por actividades contaminantes o transformadoras del territorio.

3. Comparar el valor económico del impacto con el de otras alternativas (ranking).

3b. Identificar alternativas para compensar con impactos positivos.

Cálculo del valor responsable de la naturaleza